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El Branding como arma de guerra

  • Inmaculada Chacon
  • 9 mar 2022
  • 2 Min. de lectura

Actualizado: 16 nov 2023



31 de enero de 1990 McDonald's abrió su primer establecimiento en la URSS, un día en el que miles de moscovitas, alrededor de 30.000, aguantaron colas kilométricas ante la nueva hamburguesería en la plaza Púshkinskaia del centro de Moscú.

La llegada del primer McDonald's a la antigua Unión Soviética supuso un antes y un después en la vida del país y su integración en el mundo moderno y capitalista.

24 de febrero de 2022, Rusia invade Ucrania, algunos empezamos a fijarnos en una especie de Z pintada en los tanques Rusos. La "Z" ( no existe en el cirílico usado en Rusia) aparece en la invasión de Ucrania con el objetivo de distinguir a las unidades militares rusas de las ucranianas, que usan equipamiento muy parecido y así evitar confusiones. Pero esta señal para eludir el fuego amigo se han convertido en un símbolo de apoyo a los soldados rusos por parte del pueblo y dirigentes que aplauden la invasión.


Una invasión que no va a ser retransmitida por ningún medio de comunicación internacional ni independiente. Uno a uno, los principales medios de comunicación occidentales, han decidido marcharse de Rusia después de las leyes aprobadas en el parlamento ruso que castigan con penas de cárcel de hasta 15 años por difundir toda aquella información sobre la guerra que el Kremlin no considere cierta. De momento Rusia ha levantado un nuevo Telón de Acero.


9 de marzo de 2022, McDonald's anunció finalmente que cierra temporalmente todos sus locales porque no puede "ignorar el innecesario sufrimiento causado a Ucrania". A este gigante mundial, le siguen Starbucks y Coca-Cola. Antes lo han hecho Apple, Microsoft, IKEA, VISA, una detrás de otra están abandonando Rusia. Nunca antes habíamos asistido a un posicionamiento tan radical por parte de las grandes corporaciones internacionales.


Probablemente, las acciones que han tomado al abandonar a los consumidores rusos se antojen de mayor calado y tengan mayores repercusiones en la lucha de un pueblo, rehén de su propia historia, y empiece a despertar conciencias que griten ante toda la propaganda estatal que el régimen dictatorial y asesino está esparciendo entre sus ciudadanos. Por mucha Z que nos pinten, lo que le estamos enseñando a Putin es que puestos a elegir una Z nos quedamos con la de Mazinger y sus valores:

..." la maldad, el terror, Koji puede dominar y con él su robot Mazinger!!..

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